A lo largo de la historia, los perros han desempeñado un papel muy importante en la sociedad, y concretamente, en relación con los niños. Los más pequeños disfrutan de la compañía de sus mascotas y establecen con ellos una relación única, que no se reproduce con ningún otro animal ni con ninguna otra persona.1 Al igual que ocurre con las personas, cada perro tiene su propia personalidad. No cualquier perro puede convivir con niños, aquellos animales más pacientes, tranquilos y sociables son los más indicados para compartir juegos y aventuras con los más pequeños.2 En ningún caso un niño debe convivir con un perro que muestre excitabilidad, tenga miedos de las personas, haya mordido con anterioridad, etc.3
La relación establecida entre un niño y su perro será de gran ayuda para su desarrollo.1,4,5,6,7,8 Un perro puede participar en la educación de un niño dándole ejemplo de expresividad mediante lenguaje no verbal, satisfacción con pequeñas cosas, aceptación de las normas de convivencia, capacidad de adaptación, fidelidad, etc.1
Es importante conocer cuál es la forma natural de relacionarse entre niños y perros, para así tomar las medidas necesarias y evitar situaciones de riesgo. Por ejemplo:
- Un niño pequeño con 2-3 años de edad se relaciona de forma natural con los perros golpeándolos, empujándolos y agarrándolos.9
- Un cachorro con 1-4 meses de edad tiende a perseguir cualquier cosa que se mueva y juega mordiendo sin ser consciente de su fuerza.10,11,12,13
- Cuando el niño tiene 3-4 años, tiende a acariciar a los perros, pero sin controlar la fuerza.9
- Los cachorros entre los 4-6 meses juegan a morder y a romper.10,11,12,13
- Los niños entre 5-6 años abrazan, estrujan y masajean a los perros.9
Los cambios que sufre el niño en relación con el perro se producen de forma paralela a los cambios que sufre en el desarrollo de sus relaciones personales con su entorno. El perro es un compañero ideal de juegos y aventuras para los niños, les facilita la interacción con su entorno y mejora su consciencia corporal y social.8 La convivencia de los niños con perros desde la infancia les ayuda en el aprendizaje del lenguaje,14 mejora el control de conductas agresivas, aumenta la autoestima del niño y su bienestar psicológico,7 acelera el desarrollo psicomotor5,6 a través del juego, el perro le aporta sensación de protección cuando los padres no están presentes, aumenta la capacidad de concentración del niño, reduce el estrés (acariciar a un animal disminuye la presión sanguínea, transmitiéndole al niño un sentimiento de tranquilidad1), ayuda a enseñar los valores como el respeto y a aceptar a los demás sin prejuicios. Educar a un niño sobre el cuidado de un animal favorece sus capacidades sociales en la etapa adulta. Siendo el niño el propietario y responsable de una mascota, mejora su capacidad para desarrollar diferentes habilidades (sociales, motrices, cognitivas, etc.),5,6,7,8,14 incrementa su sentido de responsabilidad, le incita a participar en las actividades que se realicen en el hogar, le favorece el desarrollo de empatía, etc. Son numerosos los beneficios de las relaciones entre niños y perros, pero también existen riesgos que es necesario prevenir, como por ejemplo, la agresividad canina dirigida a niños.
Cada año millones de personas son agredidas por perros, causándoles lesiones físicas y psicológicas de diversa gravedad.15,16,17,18,19,20,21,22 Los perros no suelen atacar, excepto si sienten miedo, se sienten acorralados o defienden un recurso muy valioso, como por ejemplo: la comida, el territorio, etc.10,11,11.12,13,21
Los niños son las principales víctimas de las mordeduras de perro, siendo los menores de 7 años la población de riesgo,19,20,21 ya que carecen de una conciencia clara de las conductas que pueden molestar al perro, por su estatura media la cabeza del niño está al mismo nivel que la cabeza del perro, no son capaces de advertir a tiempo las señales de amenaza emitidas por el perro, y tampoco son capaces de defenderse durante un ataque.19,20,23 La mayoría de los accidentes ocurren en el hogar por parte de perros conocidos por los niños.3,20,23,25 Normalmente, los episodios de agresiones caninas hacia niños que se producen en la calle tienen lugar sin que se haya producido ninguna interacción previa entre el niño y el perro. Por el contrario, los episodios de agresiones caninas hacia niños que tienen lugar en el domicilio están provocados por un juego inadecuado del niño con el perro, abrazarles, molestar al perro mientras come o duerme, pegarle, etc.9,10,11,12,13,24 Para que la convivencia entre niño y perro sea positiva, es necesario establecer pautas que orienten a ambos sobre cómo relacionarse.23,25,26,27
La prevención de las agresiones caninas se debe realizar de una forma multidisciplinar,28 siendo las principales herramientas para la prevención de las agresiones dirigidas a niños las siguientes:
1. La educación infantil: Mejorar la comprensión de los niños y sus conocimientos sobre los perros, reduce significativamente el riesgo de agresión.23,25,26,27,30
Conocer los conocimientos previos de los niños respecto a los perros nos permite detectar el conocimiento que ya poseen, a partir del cual, construir nuevos aprendizajes.
Mediante una metodología basada en la comunicación oral, la observación de ilustraciones didácticas y/o imágenes reales, escucha activa de cuentos, juegos, etc. adaptados a cada edad, se pueden enfocan diversos objetivos didácticos:
- Identificar el lenguaje canino.
- Realizar (bajo supervisión de un adulto) los cuidados básicos a un perro (previamente seleccionado y entrenado para tal fin), como por ejemplo: alimentación, cepillado, etc.
- Conocer los objetos personales de un perro y distinguirlos de los objetos personales de los miembros de la familia, como por ejemplo: plato/comedero.
- Simular (bajo supervisión de un adulto) una interacción segura con un perro (previamente seleccionado y entrenado para tal fin).
- Observar conductas naturales del perro, como por ejemplo: el juego, el descanso, etc.
- Actuar de forma correcta y segura ante diversas situaciones de conflicto, como por ejemplo: un perro comiendo, un perro gruñendo, etc.
2. Informar a padres y propietarios de perros26,27,29,30,31 sobre las pautas y medidas a tomar para evitar situaciones de conflicto, como por ejemplo:
- La supervisión de un adulto ante una posible interacción entre niños pequeños y perros, en aquellos casos en los que no sea posible, establecer medidas físicas de seguridad.
- Alentar a los niños a solicitar ayuda de un adulto ante situaciones de conflicto con un animal.
- Comprender el lenguaje canino.
- Respetar momentos de descanso del animal.
- Tratar al perro con cariño, evitando las zonas más sensibles del animal, los gritos y los movimientos bruscos.
- No molestar al perro mientras come.
- No interferir en el trabajo de perros guía, asistencia, etc.
3. Concienciación social, por parte de las autoridades, sobre la gravedad del problema y las posibles soluciones administrativas.22
4. Legislación de tenencia de animales eficaz, en la que se tenga en cuenta todo lo expuesto con anterioridad.
Carmen Mengíbar
Referencias bibliográficas
- Infografía del Estudio Fundación Affinity Niños y Animales. 2015
- Gershman KA, Sacks JJ, Wright JC. Which dogs bite? A case-control study of risk factors. Pediatrics. 1994.
- Chun YT, Berkelhamer JE, Herold TE. Dog bites in children less than 4 years old. Pediatrics. 1982.
- Poresky R. H. Companion Animals and other Factors Affecting Young Children’s Development. Anthrozoös. 1996.
- Gee, N. R. The Presence of a Therapy Dog Results in Improved Object Recognition Performance in Preschool Children. Anthrozoös. 2012.
- Gee, N. R. Preschool Children Require Fewer Instructional Prompts to Perform a Memory Task in the Presence of a Dog. Anthrozoös. 2010.
- Schuck, S. E. et. Al. Canine-Assisted Therapy for Children With ADHD: Preliminary Findings From The Positive Assertive Cooperative Kids Study. Journal of Attention Disorders. 2015.
- Dueñas, J.M.; Gonzalez, L.; Forcada, R.; Duran-Bonavila, S.; Ferre-Rey, G.; The Relationship Between Living with Dogs and Social and Emotional Development in Childhood. 2021.
- Mathews JR, Lattal KA. A behavioral analysis of dog bites to children. J Dev Behav Pediatr. 1994.
- Debra F. Horwitzy Daniel S. Mills.; BSAVA Manual de Medicina del Comportamiento Canino y Felino. Edición 2ª. 2009.
- Landsberg G., Hunthausen W., Ackerman L.; Behavior problems of the dog and cat. Edición 3º. 2012.
- Manteca X. Etología clínica veterinaria. 2ª edición. 2002.
- Hernandez Garzón, P.; Manual de etología canina.
- Podberscek AL, Blackshaw JK, Nixon JW. The incidence of dog attacks on children treated at a city hospital. Aust Vet J. 1990.
- Méndez, M. Gómez, I. Somoza y otros: Mordeduras de perro. Análisis de 654 casos en 10 años. Anales españoles de Pediatría 2002.
- Fatjó J., Amat M., Mariotti V. et al. ; Análisis de 1040 casos de agresión canina en una práctica de referencia en España. Revista de Comportamiento Veterinario 2007.
- Rosado, B., García-Belenguer S., León M., Palacio J. Acto español de animales peligrosos: efecto sobre la epidemiología de las mordeduras de perros. Revista de Comportamiento Veterinario 2007.
- Rosado, B., García-Belenguer S., León M., Palacio J.: Un estudio completo de las mordeduras de perros en España, 1995-2004. Veterinary Journal 2009.
- Overall K, Love, M. Dog bites to humans: demography, epidemiology, injury, and risk J Am Vet Med Assoc. 2001.
- Kahn A, Bauche P, Lamoureux J et al. Child victims of dog bites treated in emergency departments. Europ J Pediatr 2003.
- Palacio J, García-Belenguer S, Sanjulián JR, Fatjó J, Manteca X. Agresividad canina dirigida a personas en la provincia de Huesca, 1995-1996. Congreso Nacional de la Asociación de Veterinarios Especialistas en Pequeños Animales. Santiago de Compostela, 1998.
- Organización Mundial de la Salud: Mordeduras de animales: No. 373 Hoja informativa: 2013.
- Beck AM, Jones BA. Unreported dog bites in children. Public Health Rep. 1985.
- Brogan TV, Bratton SL, Dowd MD, Hegenbarth MA. Severe dog bites in children. Pediatrics. 1995.
- Guy, N.C., Luescher, U.A., Dohoo, S.E., Spangler, E., Miller J.B., Dohoo,I. R., Bate, L.A.A case series of biting dogs: characteristics of the dogs, their behaviour, and their victims. Appl Anim Behaviour Sci 2001.
- Orr J., LewinT., Shyock J., Potter-Kotecki K.; El programa Be a Tree TM: prevención de mordeduras de perro para niños en edad escolar. Www.be-a-tree.com
- Mengíbar C.: Manual para la prevención de la agresividad canina dirigida a niños. 2014
- Kendal S.: Niños y perros: 12 reglas básicas para una interacción segura. Editorial Kns. 2008.
- Chapman S, Cornwall J, Righetti J, Sung L. Preventing dog bites in children: randomised controlled trial of an educational intervention. 2000.
- Meints: The Blue Dog Guía para padres y CD: Seguro Entre las relaciones entre niños y perros. 2007